Florida en el ojo del huracán investigativo: Remolcador en la mira tras el choque del Escuela Cuauhtémoc La noche del pasado sábado, la imponente silueta del Puente de Brooklyn fue testigo de una tragedia que aún genera interrogantes. El buque Escuela Cuauhtémoc, símbolo de la tradición naval mexicana, se vio envuelto en un fatal choque que obligó a detener su curso y a poner en riesgo a sus 277 tripulantes. La pérdida de dos cadetes, registrada en el infortunado accidente, ha sido el punto de partida para que la NTSB desvele qué papel jugó el remolcador en la maniobra.
Fuentes cercanas a la investigación destacan que los primeros indicios señalan una posible irregularidad en los procedimientos de remolque. "Parte de nuestra labor será revisar si la asistencia fue liberada prematuramente o si existieron fallas en la coordinación, lo cual pudo agravar la deriva del buque hacia la estructura del puente", declaró un funcionario de la agencia. La combinación de factores humanos, mecánicos y ambientales formará el entramado que las autoridades deberán desentrañar en un proceso que promete ser largo y riguroso.
Este incidente, que ha conmocionado a la comunidad marítima y atraído la atención internacional, no solo exige un análisis técnico profundo, sino que también llama a replantear los protocolos de seguridad en maniobras críticas. La sinergia entre las investigaciones estadounidenses y mexicanas es clave para obtener un panorama completo que permita evitar que hechos similares vuelvan a ocurrir.