El ingeniero aeroespacial Sergio Hidalgo aseguró que ofrecer paracaídas a cada pasajero en vuelos comerciales es “una cosa de locos” debido a la presión interior de la cabina, la falta de tiempo para abrir las puertas y las enormes penalizaciones de peso y espacio que implicaría un sistema así. Hidalgo, invitado al podcast The Wild Project, subrayó que ni siquiera a 10 000 pies sería posible accionar las salidas de emergencia y que la urgencia de una evacuación hace inviable cualquier maniobra de salto. Solo en pequeñas aeronaves de hasta cinco plazas donde este equipamiento sí existe ha demostrado su eficacia.