Parece que Nayib Bukele, presidente de El Salvador, adquirió un terreno valorado en millones de dólares dentro de Playa El Flor, una zona protegida por su biodiversidad y belleza natural. Este lugar forma parte del parque marino Los Cóbanos, un área reconocida por su importancia ecológica y su fragilidad ambiental. Aunque la compra se realizó en 2019, la transacción permaneció oculta hasta que una investigación periodística reveló los detalles.
La noticia ha generado una ola de críticas y preocupación entre ambientalistas y ciudadanos, quienes cuestionan la legalidad de la operación y el impacto que podría tener en el patrimonio natural del país. En El Salvador, las leyes prohíben la privatización de áreas protegidas, pero parece que hubo omisiones en los documentos oficiales que facilitaron la venta. Este caso ha puesto en el centro del debate la necesidad de proteger los recursos naturales frente a intereses privados.
El terreno adquirido incluye zonas donde las actividades privadas están restringidas, lo que ha encendido las alarmas entre quienes defienden el medio ambiente y la biodiversidad. Los expertos advierten que permitir este tipo de transacciones podría sentar un precedente peligroso para el futuro de las áreas protegidas en el país. Hasta el momento, Bukele no ha emitido declaraciones oficiales sobre el tema, dejando muchas preguntas sin respuesta.